Reflexión Evangelio 7 de Octubre | Nuestra Señora del Rosario – Memoria

EL SANTO ROSARIO AUXILIO DEL CRISTIANO
Reflexión Evangelio 7 de octubre

Reflexión Evangelio miércoles 7 de octubre de 2020
Nuestra Señora del Rosario – Memoria.
Vigésima sexta semana / Tiempo Ordinario
Año Par

Introducción

San Pío V atribuyó la victoria de Lepanto, el 7 de octubre de 1571 con la cual desaparecieron graves amenazas para la fe de los cristianos, a la intercesión de la Santísima Virgen, invocada en Roma y en todo el orbe cristiano por medio del Santo Rosario, y quedó instituida la fiesta que celebramos hoy. Con este motivo, fue añadida a las letanías la invocación Auxilium christianorum. Desde entonces, esta devoción a la Virgen ha sido constantemente recomendada por los Romanos Pontífices como «plegaria pública y universal frente a las necesidades ordinarias y extraordinarias de la Iglesia santa, de las naciones y del mundo entero» (Juan XXIII, Carta Apost. Il religioso convegno 29-IX-1961)

En el Santo Rosario no se trata solo de repetir las Avemarías a Nuestra Señora, que, como procuramos hacerlo con amor quizá poniendo peticiones en cada misterio o en cada Avemaría, no nos resultan monótonas. En esta devoción vamos también a contemplar los misterios que se consideran en cada decena. Su meditación produce un gran bien en nuestra alma, pues nos va identificando con los sentimientos de Cristo y nos permite vivir en un clima de intensa piedad: gozamos con Cristo gozoso, nos dolemos con Cristo paciente, vivimos anticipadamente en la esperanza, en la gloria de Cristo glorificado (Pablo VI, Exhort, Apost. Marialis cultus, 2-II-1974, 46)

La Virgen es Madre de Dios y Madre nuestra, y es este el título supremo con que la honramos y el fundamento de todos los demás. Por ser Madre de Cristo, Madre del Creador y del Salvador, lo es de la Iglesia, de la divina gracia, es Madre purísima y castísima, intacta, incorrupta, inmaculada, digna de ser amada y de ser admirada. En las letanías se recogen diversos aspectos de la virginidad perpetua de María: es Virgen prudentísima, digna de veneración, digna de alabanza, poderosa, clemente, fiel… (san Juan Pablo II, Enc. Redemptoris Mater, 25-III-1987, n. 38.)

ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Lucas 1, 28
R/. Aleluya. Aleluya
Alégrate, María, llena de gracia, el Señor está contigo; bendita tú eres entre las mujeres. R/

EVANGELIO

San Lucas 1, 26-38
Concebirás en tu vientre y darás a luz un hijo

Lectura del santo evangelio según san Lucas

En aquel tiempo, el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea llamada Nazaret, a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la estirpe de David; la virgen se llamaba María.
El ángel, entrando en su presencia, dijo:
—«Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo».
Ella se turbó ante estas palabras y se preguntaba qué saludo era aquél.
El ángel le dijo:
—«No temas, María, porque has encontrado gracia ante Dios. Concebirás en tu vientre y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús. Será grande, se llamará Hijo del Altísimo, el Señor Dios le dará el trono de David, su padre, reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin».

Y María dijo al ángel:
—«¿Cómo será eso, pues no conozco a varón?».
El ángel le contestó:
—«El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y la fuerza del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el Santo que va a nacer se llamará Hijo de Dios.
Ahí tienes a tu pariente Isabel, que, a pesar de su vejez, ha concebido un hijo, y ya está de seis meses la que llamaban estéril, porque para Dios nada hay imposible».
María contestó:
—«Aquí está la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra». Y la dejó el ángel.
Palabra del Señor. Gloria a ti Señor.

Fray Nelson Medina, O.P.
El Rosario y su poder de convocatoria
MEMORIA DE NUESTRA SEÑORA DEL ROSARIO Tal vez un Santo Rosario no cambia nada, pero un Santo Rosario cada día lo cambia todo.

Como rezar el Santo Rosario

Para la reflexión personal
  • ¿Rezo el Santo Rosario? ¿Cómo lo rezo? ¿Qué significa para mí?
  • Rezar el Rosario es signo de amor a María y manifestación de nuestra confianza en Ella. ¿Qué debo agradecer a la Virgen? ¿Confío en ella en mi momentos de lucha espiritual y con el mundo?
Oración

Oremos, para que, con María, sepamos pronunciar nuestro fiat a Dios por la humanidad. Que su implicación en el proyecto de salvación nos encamine hacia una mayor profundización en nuestra fe, al servicio de quienes en este mundo sienten el sufrimiento y el pesar de la existencia. Que en María encuentren el consuelo de Dios. Amén.

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