Reflexión Miércoles 9 de junio | 10ma. Semana Tiempo Ordinario – Año Impar

IR MÁS ALLÁ DEL LEGALISMO
Reflexión Miércoles 9 de junio

Reflexión Miércoles 9 de junio de 2021
10ma. Semana Tiempo Ordinario
Año Impar


ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO (Cfr. Sal 24, 4. 5)
R/. Aleluya, aleluya.

Descúbrenos, Señor, tus caminos y guíanos con la verdad de tu doctrina. R/.

EVANGELIO

Mateo 5, 17-19
No he venido a abolir la ley, sino a darle plenitud.

Lectura del santo Evangelio según san Mateo

En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: «No crean que he venido a abolir la ley o los profetas; no he venido a abolirlos, sino a darles plenitud. Yo les aseguro que antes se acabarán el cielo y la tierra, que deje de cumplirse hasta la más pequeña letra o coma de la ley.

Por lo tanto, el que quebrante uno de estos preceptos menores y enseñe eso a los hombres, será el menor en el Reino de los cielos; pero el que los cumpla y los enseñe, será grande en el Reino de los cielos».
R/. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.

Reflexión

En la Ley hay preceptos naturales que nos dan ya la santidad; incluso antes de dar Dios la Ley a Moisés, había hombres que observaban estos preceptos y quedaron justificados por su fe y fueron agradables a Dios. El Señor no abolió estos preceptos sino que los extendió y les dio plenitud. 

Eso es de lo que nos dan prueba sus palabras: «Se dijo a los antiguos: no cometerás adulterio. Pues yo os digo: el que mira a una mujer casada deseándola, ya ha sido adúltero con ella en su interior.» Y también: «se dijo: no matarás. Pero yo os digo: todo el que esté peleado con su hermano sin motivo tendrá que comparecer ante el tribunal» (Mt 5,21s)… Y así todo lo que sigue.

Todos estos preceptos no implican ni la contradicción ni la abolición de los precedentes, sino su cumplimiento y extensión. Tal como el mismo Señor dice: «Si no sois mejores que los letrados y fariseos, no entraréis en el Reino de los Cielos (Mt, 5,20).

Con estas enseñanzas, él no contradecía a la Ley, sino que la llevaba a su cumplimiento, a su plenitud y ponía en nosotros la raíz de las prescripciones de la Ley… Prescribir, no sólo de abstenerse de los actos prohibidos por la Ley, sino incluso de su deseo, no es de alguien que contradice y adolece la Ley, sino el hecho de quien la cumple y extiende.

Servir en libertad

De esta manera no le servimos como si fuéramos esclavos sino que nos adelantamos a servirle como hombres libres que somos. En todas las cosas Cristo te invita a ser útil a tu prójimo, no teniendo en cuenta su maldad, sino poniendo tu bondad al máximo. De esta manera nos invita a hacernos semejantes a nuestro Padre «que hace salir el sol sobre malos y buenos, y manda la lluvia a justos e injustos». (Mt 5,45).

El servicio de la libertad es el servicio más grande; nuestro libertador nos propone, respecto a él, una sumisión y una devoción más profundas. Porque él no nos ha liberado de las obligaciones de la Ley antigua para que le abandonemos sino para que, habiendo recibido su gracia más abundantemente, le amemos cada vez más, y habiéndole amado más, recibamos de él una gloria cada vez más grande cuando estaremos para siempre en presencia de su Padre. (San Ireneo de Lyon. Contra las herejías: IV, 13,3)

Reflexión Miércoles 9 de junio

Fray Nelson Medina, O.P.
Reflexión Miércoles 9 de junio de 2021
El gran regalo del Espíritu es que da el querer.
La ley de Moisés da el conocer pero no da el querer; el Espíritu no solo da el conocer, lo que le agrada a Dios sino que también nos infunde con su amor el querer
Para la reflexión personal

«Nadie por sí y por sus propias fuerzas se libera del pecado y se eleva sobre sí mismo; nadie queda completamente libre de su debilidad, o de su soledad, o de su esclavitud»; todos tenemos necesidad de Cristo modelo, maestro, médico, liberador, salvador, vivificador. Sin Él nada podemos; con Él, lo podemos todo. Cfr. Conc. Vat. II, Decr. Ad gentes, 8 tomado de Hablar con Dios

Oración

Señor Dios nuestro, tú has tomado la iniciativa de amarnos y de traernos tu libertad por medio de tu Hijo Jesucristo. Enriquécenos con el Espíritu de Jesús, derrámalo sobre nosotros generosamente, sin medida, para que no nos escondamos por más tiempo detrás de tradiciones y de la letra de la ley
para apagar al Espíritu Santo que quiere hacernos libres. Que él ensanche nuestro corazón y estimule nuestra fantasía para que sepamos descubrir los numerosos caminos del amor para cumplir la ley a la perfección. Amén.


Tema #1: Introducción Al Libro De Apocalipsis – Curso de Apologética II

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